Una duda que le surge a muchos policías es saber cuándo pueden usar sus cámaras policiales individuales. En este artículo te contamos bajo qué circunstancias es legal usar estos dispositivos.
Las nuevas tecnologías han llegado para quedarse, y la posibilidad de registrar en vídeo las intervenciones, es una ventaja de la que quieren gozar los policías; salvaguardando sus acciones y garantizando un mejor servicio al ciudadano. Cada vez son más los cuerpos de policía en España, que están dotando con cámaras individuales de policía a sus agentes. Pero, en las plantillas donde aún no son suministradas en dotación, sus policías están adquiriendo individualmente cámaras particulares y exponiéndose a la duda de si pueden utilizarlas.
Aunque aún no existe una legislación específica sobre el uso de medios de grabación individuales. Tres textos legales influyen en el uso de estas cámaras por parte de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. La Ley de Enjuiciamiento Criminal (Lecrim), la Ley Orgánica 4/2015 y la Ley de Protección de Datos (LOPD).
La Lecrim, en su artículo quinquies 588 autoriza a la policía, en funciones judiciales, la grabación de imágenes en espacio público que ayuden al esclarecimiento del delito. Estas funciones judiciales, se realizan en el momento en que cualquier policía, tenga constancia de que se está produciendo la comisión de un delito.
La Ley 4/2015 cuenta con el artículo 22, que señala de manera específica, el uso de videocámaras. Y aunque autoriza su uso, indica que deberá estar autorizado su empleo por el Delegado del Gobierno. Este es el texto que más controversia genera.
LOPD, aquí encontramos nítidamente el muro que delimita el uso de las cámaras unipersonales policiales. La prohibición de grabar en el interior de viviendas sin la autorización explícita del morador o autorización judicial. Esto también lo tiene en cuenta la Lecrim. Y la gestión de las imágenes que garanticen que no puedan ser alteradas ni extraviadas. Es decir, que los dispositivos de grabación policial, cuenten con un software seguro y específico para el guardado y manipulación de las imágenes. Lo que descarta el uso de teléfonos móviles o las conocidas cámaras de acción.
la policía sí puede usar sus cámaras de vídeo individuales
El estudio de las normas anteriores nos permite concluir que la policía sí puede usar sus cámaras de vídeo individuales en una circunstancia delimitada claramente; cuando ayude al esclarecimiento del delito.
Pensemos en el supuesto que un policía persigue al sospechoso de un hurto, al alcanzarlo, el individuo se niega a seguir las indicaciones del agente y muestra visiblemente la intención de agredirle. Haciendo uso de su arma no letal, el policía consigue inmovilizar y detener al sujeto, pero éste declara posteriormente, que ha sido agredido por el policía sin causa justificada. Por suerte, el agente llevaba su cámara individual, que grabó todo el suceso y prueba, ante la autoridad judicial, que la intervención del policía fue proporcional y oportuna.
Un detalle del relato anterior, la cámara sólo grabó el enfrentamiento para ser usado con interés probatorio lo registrado, como contempla la Lecrim. Si el policía esa jornada hubiese tenido un día de trabajo tranquilo, pero su cámara estuvierese grabando continuamente, habría incumplido la Ley Orgánica 4/2015.
Por esto, las mejores cámaras policiales cuentan con la característica de comenzar la grabación automáticamente, cuando el policía que la lleva saca su pistola eléctrica Taser o el arma de fuego. Se trata de las AXON CAM, que están conectadas inalámbricamente a los dispositivos Taser fabricados también por AXON®.
Al ser la mayor empresa tecnológica de seguridad del mundo; permite a esta empresa trasladar las particularidades del trabajo policial a sus dispositivos. Sus AXON Body cuentan con unas características únicas para ayudar a los policías en su trabajo, lo que las convierte en la mejor cámara policial del mercado.
Está demostrado que la integración de cámaras individuales en el equipamiento policial, disminuye las encuentros que acaban en agresiones. Los ciudadanos se sienten más seguros con policías que registran en vídeo sus intervenciones y los malos saben que su palabra deja de estar respaldada por la duda.
Aunque la legislación parezca confusa respecto al uso, se demuestra que usar cámaras policiales individuales en los casos expuestos esta legalmente justificado. Recordemos; cuando ayude al esclarecimiento del delito, nunca podrá estar grabando fuera de estas situaciones, nunca en viviendas sin permiso o autorización judicial y el dispositivo debe ser específico para el trabajo policial.
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