Se multiplican los tiroteos la primera semana sin policías de paisano en Nueva York

Tras las manifestaciones y altercados del movimiento Black Life Matters (BLM) la semana pasada, el alcalde de Nueva York; Bill de Blasio, disolvió la Unidad Anti-crimen el pasado lunes día 15. Esta unidad de policía es famosa por protagonizar infinidad de películas y series, además se caracteriza porque sus agentes siempre trabajan de paisano. En la primera semana con esta medida en vigor, los tiroteos han sufrido un fuerte aumento en la ciudad más poblada de Estados Unidos.

Según el New York Post; 28 tiroteos habían dejado 38 víctimas hasta el viernes. Y ese viernes junto al sábado se produjeron más de una docena de tiroteos, mientras que la madrugada del domingo 8 personas fueron víctimas de disparos. La misma semana del año pasado se registraron sólo 12 tiroteos. Estos datos han hecho saltar las alarmas y recordar a muchos los duros tiempos de una ciudad comida por el crimen durante la década de los setenta y parte de los ochenta.

28 tiroteos esta semana frente a 12 el año pasado.

La Unidad que primero se entera de todo.

 

La medida del alcalde de Blasio, solicitada por el movimiento BLM, ha supuesto volver a poner el uniforme a unos 600 agentes que pertenecían a la Unidad Anti-crimen, y parece claro que el aumento de tiroteos en la ciudad se debe a esta decisión. Sus agentes, a nivel oficial, no son más que policías sin uniforme con las mismas competencias que cualquier patrullero, pero la flexibilidad que le aporta trabajar de paisano les hacía temibles contra las bandas de barrio, a cuyos integrantes conocen por sus nombres. Era la unidad que más armas incautaban y mayor «inteligencia» recababan en la calle.

Esta unidad está a medio camino del patrullero y del detective, o policía judicial. De hecho; estar en ella es el paso previo para ascender y ganarse la placa de detective. Su integrante más famoso fue Serpico, cuya vida acabó llevada a la gran pantalla interpretado por Al Pacino.

Su particular forma de trabajar, hace que sus integrantes sean los primeros en llegar y acaban muchas de sus actuaciones en tiroteos y quejas a la policía. Aunque la policía de Nueva York está equipada con Taser y cámaras policiales Axon Body; el ir de paisano justificaba en muchas ocasiones que los agentes no contaran con estas herramientas menos agresivas y que aportan respaldo a sus actuaciones. Por ello tenían una reputación particularmente problemática que es lo que ha provocado su disolución.

Algo de historia.

 

La introducción de la heroína en la década de los años sesenta en los Estados Unidos ocasionó que; en la siguiente década el crimen y la marginalidad se disparara en la mayoría de los barrios de Nueva York. Esa década y parte de la siguiente son recordadas en la ciudad de los rascacielos como una época oscura en la que pasear por sus calles era una actividad de riesgo, aquellas insoportables tasas de delincuencia se mantuvieron hasta los noventa (la heroína había dejado paso al crack) en la que Rudy Giulani se hizo con la alcaldía, e implementó la Estrategia Policiaca Número Cinco, comúnmente conocida por Tolerancia Cero. Las medidas puestas en marcha bajo esta estrategia supusieron un descenso del crimen del 65% y del 70% en los asesinatos.

Junto a otras medidas sociales y económicas, provocó que la ciudad viviera una segunda edad de oro hasta nuestros días, en los que las medidas del actual alcalde parece cambiar la dinámica delincuencial de la que disfrutaba la ciudad.