Si estás buscando una cámara corporal específica para el trabajo policial, hemos preparado este artículo para ayudarte a encontrarla. Y para empezar en tu búsqueda; debes saber las características que necesita tener, para que a la hora de comprar la mejor cámara corporal policial; aciertes de lleno.
Estos dispositivos, también llamados bodycam o dispositivos de grabación unipersonales, están ayudando enormemente a los policías en el desempeño de su trabajo, hasta tal punto, que se ha convertido en una herramienta imprescindible en las comisarias, donde ya todos los policías salen a patrullar cada jornada con su cámara corporal.
Su uso aporta varías ventajas; pero las principales son: garantiza las actuaciones, rebaja la violencia en las intervenciones y ahorra costes a la administración. Estos beneficios de las cámaras corporales policiales son solo los más importantes, porque cada nuevo estudio que se realiza sobre su utilización en las fuerzas de seguridad; descubre una nueva virtud.
También está siendo la tecnología policial de más rápida introducción en la labor para la que ha sido creada. Hace unos 15 años empezaron a surgir las primeras cámaras corporales específicas para el trabajo policial y desde entonces, han sido incorporadas por las policías más punteras y que más se preocupan por la satisfacción del ciudadano al que sirven.
Y ahora sí; la lista de cualidades imprescindibles que debes mirar a la hora de comprar la mejor cámara corporal policial:
1- Resistente
La policía es, por definición: todoterreno. Y por eso su equipo debe ser resistente para soportar todas las condiciones de trabajo a las que están expuestos sus usuarios. Por este motivo, es crucial que la cámara corporal sea resistente; para conseguirlo, su chasis estará preparado para soportar el peor trato y a su vez, en el exterior debe emplear plástico rugerizado, que absorba los impactos en caídas de al menos 2 metros, e impida la entrada de agua y polvo. Y debe certificar la protección contra estos dos elementos citados; el estándar más solvente que certifica esta protección es IP, que se rige por la norma internacional IEC 60529. Y sabiendo esto; debes buscar la cámara corporal más resistente que tenga certificación IP68; en la que el 6 nos dice que tiene protección completa frente al polvo, y el 8 que permite quedar sumergida a baja profundidad y un tiempo limitado.
2- Pre-grabación y post-grabación
Una de las características que diferencia a una cámara corporal policial del resto, es la opción de pre-grabación y post-grabación. La pre-grabación es la función de retrasar el momento en el que se activó la grabación. Es una función pensada para encontrar respuestas de las situaciones que motivaron la actuación que se grabó, en el caso de que esta se produjera con la «acción» ya iniciada. Y la post-grabación es lo mismo, pero para ver y oír inmediatamente después de que la grabación terminara. Útil para conocer un suceso que ocurrió justo al dejar de grabar y porque el operador supuso que la intervención había finalizado. Las mejores cámaras corporales policiales deben tener un tiempo de pre-grabación de al menos dos minutos y medio y de post-grabación de mínimo un minuto.
3- Seguridad
En este artículo estamos tratando una tecnología cuya razón de ser es registrar evidencias probatorias de delitos. Por lo que es indispensable que las cámaras corporales que se utilicen en esta función cumplan con las máximas garantías procesales. Esto lo logran encriptando sus grabaciones directamente; es decir; encriptan las grabaciones directamente en el propio dispositivo sin necesidad de pasar por su software de gestión. De esta forma evitarás problemas con la «cadena de custodia» y que las grabaciones no puedan ser empleadas en un juicio. Fíate de las que usen las formas de encriptación más avanzadas; actualmente es el AES256 y si la cámara corporal policial permite la emisión remota en directo; deberá emitir con un sistema seguro de datos de punta a punta. Es decir, emite la grabación codificada a un receptor que es el único con capacidad de desencriptar la emisión.
4- Calidad de imagen
No es novedad decirte que la tecnología avanza más rápido de lo que somos capaces de asimilar. Y sobre todo la relacionada con la imagen, que es donde más estamos notando el cambio cuando vemos grabaciones de hace unos pocos años. Así, que es sorprendente que existan aún en el mercado de cámara corporales, algunas que graben a resoluciones superadas de muy baja definición. La mejor resolución para no perder detalle tiene comenzar al menos desde los 720 píxeles, aunque los ideales son ahora mismo los 1080 píxeles para una calidad de imagen adecuada en cualquier pantalla. También es relevante el tipo de archivo en que muestre la imagen; el más polivalente es el MPG-4 que aceptan todos los reproductores de vídeo. Confiar la calidad de la lente a un fabricante contrastado ayuda a elegir una buena bodycam, como las que utilizan lentes Sony.
5- Batería y Memoria
Ponemos estas dos características en el mismo apartado porque van de la mano; pues la memoria de la cámara corporal, o mejor dicho, el tiempo que esta le permita estar grabando, depende por completo de la capacidad de la batería. Y para aumentar la duración de la batería/grabación, ayuda que la cámara corporal policial no cuente con pantalla de visionado; que reduce considerablemente la duración de la batería. Y como queremos una cámara ligera para trabajar con ella en la calle; debemos priorizar lo importante; que es poco peso y mucha memoria. Mira también que su batería esté fabricada con gel de litio, que es con lo que se fabrican las más modernas baterías empleadas en tecnología portátil. Una batería de este tipo con 4200Mah te dará 16 horas de grabación ininterrumpida, más que suficiente en cualquier despliegue de seguridad.
6- Activación «sin manos»
Hay actuaciones en las que los acontecimientos se atropellan y el policía, a causa del estrés originado por la situación; no activa la grabación de su cámara. Para estas situaciones se ha diseñado el activador remoto que trabaja en las cámaras corporales más avanzadas. Este activador remoto activará la grabación en el momento que elijamos al configurarlo. Las opciones son múltiples: al extraer un arma, sea DEC, arma de fuego o defensa extensible. O comenzar la grabación cuando se activen las luces prioritarias del vehículo oficial, o se abra la puerta del mismo, etc. Como ves, múltiples formas de activar una cámara corporal policial remotamente con el dispositivo de activación remota. Que no solo activará la cámara del operador, si no todas de la misma marca que estén en el perímetro de cobertura del Bluetooth con el que este se comunica con las cámaras.
7- Software
De nada sirve tener la mejor cámara corporal de este tipo si su manejo es complejo; igual que la gestión de las grabaciones desde el programa de gestión de las mismas. El fabricante que se preocupa en estos detalles, hace que la configuración de sus cámaras sea sencilla, e incorpora en ellas pocos botones que permitan adaptarlas a la necesidad de cada uno y realice acciones pre-programadas; como marcar momentos durante la grabación o capturas de imagen. Respecto al programa de gestión y almacenamiento de una cámara tipo bodycam; a la hora de buscar vuestra cámara corporal policial, selecciona la que automáticamente descargue las grabaciones al final de cada servicio y que se pueda guardar en la nube para ahorraros gastar en servidores físicos dentro de vuestras instalaciones. Y si el programa de gestión de grabaciones es intuitivo, puedes decir que has elegido la mejor opción.
En resumen; por la importancia que ya están teniendo este tipo de dispositivos en el trabajo policial y los beneficios que aporta a la sociedad, su elección debe estar respaldada por unas cualidades que asegure su funcionalidad durante un tiempo prolongado que sea aceptable para un dispositivo electrónico. Y puedes estar seguro de que si reúne las 7 características que hemos enumerado aquí, puedes garantizar que te llevas la cámara corporal policial más capaz para tu trabajo.